El coronavirus ha prolongado los plazos de las obras.

Sevilla cuenta con una parroquia de la Magdalena cada vez va cobrando mayor esplendor. Y es que después de meses de trabajos, iniciados en noviembre, se han concluido las labores de mantenimiento de los paramentos verticales y la bóveda de la nave central en la zona exacta del coro alto.
Se ha procedido a la limpieza general del templo, sellando las grietas de la bóveda, consolidando las capas de enlucido de mortero y reintegrando el color de la decoración pictórica, tanto ornamental como figurativa. De igual modo, se han restaurado las vidrieras, sellando las filtraciones de agua. Sin duda, el templo ha ganado mayor color y luminosidad.
La dirección de las obras ha corrido a cargo de Agustín Martín de Soto y Antonio Gamero, técnicos adscritos a la delegación de Patrimonio, así como de una comisión formada por Antonio Rodríguez Babío (delegado de Patrimonio Cultural), el arquitecto, Miguel López y el párroco del templo, Francisco Román. En el equipo de intervención estuvieron seis especialistas en restauración del programa «Emplearte».