Con orígenes gaditanos.

La Recogía asegura que una mujer, de nombre María García Rodón, cuestionó que la corona de plata que luce la Esperanza de Triana en noviembre es una donación ilícita del anterior párroco de Santa María la Coronada (Medina Sidonia, Cádiz), una joya del siglo XIX que era de la Virgen de la Paz, del colegio de dicho nombre.
La pieza fue restaurada antes de su donación en noviembre de 2017, a la que se le sumaron amatistas de gran tamaño y un ancla en el centro por Joyería El Toisón. En un principio, la corona iba a ser para la Virgen de la Salud de San Gonzalo. No obstante, el hermano mayor de por aquel entonces, José Fernández, la rechazó al desconocer su procedencia. En teoría, podría ser la que poseía la Virgen en la destruida iglesia gaditana en julio de 2023.