La iniciativa se lleva a cabo a través del área de cooperación internacional de la Asistencia Social de la Hermandad

Cada día queda más claro que el verdadero patrimonio es el espiritual y no el material. Así lo ha debido ver la Hermandad de la Macarena quien está construyendo la Iglesia de la Esperanza en el barrio de Maliko dentro de la Diócesis de Bangassou de República Centroafricana. La construcción ya se encuentra iniciada y tras la interrupción por las lluvias que la región ha sufrido en las últimas semanas se prevé que esté finalizada para mediados del presente año.
Esta iniciativa es llevada a cabo por el área de cooperación internacional de la Asistencia Social de la Hermandad de la Macarena, en colaboración con la Fundación para la Promoción y el Desarrollo Bangassou que fue creada en 2003 por los familiares y amigos del Obispo de Bangassou, Monseñor Juan José Aguirre Muñoz, quien habiendo nacido en Córdoba es misionero combidiano y a sufrido varios atentados además de encontrarse amenazado por las mafias locales.
La fundación viene actuando como soporte para la atención espiritual de la población de la zona y desarrolla proyectos centrados en la sanidad, la educación y el bienestar, que están siendo cruciales para un país con la misma extensión de Andalucía y que no posee ningún kilómetro de carretera asfaltado, ni luz, ni teléfono donde viven unas 450.000 habitantes.
La construcción de la Iglesia de la Esperanza, que está siendo financiada íntegramente por la Hermandad de la Macarena, tendrá un altar presidido por un cuadro de la Esperanza Macarena permitiendo así a los cristianos del barrio de Maliko asistir a misa sin tener que desplazarse varios kilómetros como antes hacían.