El escrito demuestra la autoría de Juan de Mesa, a quien ya se atribuía la imagen, y detalla otras informaciones pertinentes.

Esta mañana ha tenido lugar una rueda de prensa en la Iglesia de San Gregorio donde se ha informado a los asistentes del hallazgo de un documento histórico en el interior del Cristo Yacente de la Hermandad del Santo Entierro. Durante los trabajos de restauración acometidos por Almudena Fernández García y José Joaquín Fijo León en la talla del Cristo Yacente la pasada semana, se descubrió la existencia del documento que se ha conservado dentro de la imagen desde el siglo XVII: «El Cristo ha sido una especie de cápsula del tiempo», apuntaba Pablo Mestre, profesor de la Complutense.

Al introducir en el interior del embón de la sagrada imagen una cámara endoscópica, los restauradores se percataron de la existencia de un elemento de naturaleza documental. Después de realizar las comprobaciones necesarias, se informó al hermano mayor, Fermín Vázquez Sánchez, quien dio las instrucciones correspondientes para proceder con la extracción, siempre y cuando no se comprometiera ni la integridad de la sagrada imagen ni la del documento. Los profesionales lograron extraer el escrito sin que la talla experimentase ningún daño.

El profesor Mestre ha determinado que se trata de un documento de naturaleza jurídica testimonial. Sin embargo, por el momento no se tiene certeza sobre la identidad de la persona que lo escribió. El documento señala que la corporación «mandó hacer esta santa imagen», la cual fue financiada con «limosnas de muchos devotos». También se indica que la obra fue realizada por el célebre escultor cordobés Juan de Mesa y Velasco, mientras que la encarnadura estuvo a cargo de Juan Sánchez Cotán, mencionado como «alcalde de los pintores en esta ciudad». Además, el escrito afirma que la imagen fue finalizada el 12 de marzo de 1619, lo que sugiere que el Cristo Yacente fue una de las primeras imágenes talladas por Juan de Mesa para la Semana Santa de Sevilla.

Además, en la parte final del documento aparecen tres nombres: Sebastián González, quien se presenta como «veedor de artillería desta ciudad», el licenciado Agustín Fernández de Castro y Luis Fernández Salguero. Según el profesor Mestre, la inclusión de estos nombres podría indicar que formaban parte de una junta o que contribuyeron significativamente a financiar la obra, ya que los tres figuran como testigos de la ejecución de la talla. El documento menciona que «asistieron al hacerla por su devoción». Este investigador ha logrado identificar a estos testigos a través de otras fuentes documentales encontradas en el Archivo General de Indias. Se ha confirmado que Sebastián González fue nombrado veedor de artillería de la Casa de la Contratación en 1611, mientras que el licenciado Agustín Fernández de Castro pudo haber sido abogado de la Real Audiencia de Sevilla.

Pablo Mestre considera también la opción de realizar un cotejo de la caligrafía con la de los nombres de las personas mencionadas, incluyendo el autógrafo de Juan de Mesa, para tratar de comprobar la autoría del escrito. El documento también esclarece la participación de Juan Sánchez Cotán en la encarnadura de esta venerada imagen, cuya policromía José Joaquín Fijo León ha comenzado a identificar bajo la que fue realizada en el siglo XIX por Valeriano Bécquer.

Sin duda, este hallazgo documental despeja las dudas que hasta ahora existían sobre la autoría del Cristo Yacente, confirmando las atribuciones que, desde los tiempos del profesor José Hernández Díaz, apuntaban al imaginero cordobés como el responsable de la realización del Santísimo Cristo Yacente. El hermano mayor, Fermín Vázquez, destaca que se trata de un descubrimiento de gran relevancia que arroja luz sobre uno de los momentos más desconocidos de la historia de la Hermandad del Santo Entierro.