La Pastora de Santa Marina ha concedido el distintivo a Marcelino Manzano Vilches.

La Hermandad de la Divina Pastora de las Almas de Santa Marina ha hecho oficial la concesión de su Insignia de Oro 2025 a Marcelino Manzano Vilches, actual Delegado Diocesano de Hermandades y Cofradías de la Archidiócesis de Sevilla. Esta decisión, tomada en el marco del Cabildo General Ordinario celebrado el pasado 8 de febrero, responde al deseo unánime de la corporación de reconocer públicamente la implicación y cercanía del sacerdote con la vida de la Hermandad.
El nombramiento parte de una propuesta elevada por la Junta de Gobierno y viene a poner en valor no solo la trayectoria pastoral del delegado, sino también su papel determinante en momentos cruciales para el desarrollo de esta corporación letífica. Entre ellos, destaca especialmente su colaboración en el proceso que culminó con la Coronación Canónica de la Divina Pastora, un acontecimiento que supuso un verdadero punto de inflexión en la historia reciente de la Hermandad.
Un reconocimiento con valor histórico y espiritual
La Insignia de Oro, instaurada en el año 2004, ha sido otorgada desde entonces a personalidades e instituciones que han contribuido significativamente al enriquecimiento de la religiosidad popular sevillana desde distintas áreas, ya sea en lo eclesial, cultural o social. Más allá del reconocimiento a trayectorias consolidadas, esta distinción premia gestos concretos de entrega, compromiso y servicio, elementos que la Hermandad ha querido destacar en la figura de Marcelino Manzano.
La entrega de esta distinción tuvo lugar al término de la Solemne Fiesta Principal de Instituto, uno de los momentos de mayor relevancia dentro del calendario litúrgico y cultual de la Hermandad. En un ambiente marcado por la devoción y la gratitud, la corporación quiso testimoniar su afecto hacia una persona que ha sabido caminar junto a ella con discreción, constancia y espíritu pastoral.
Una distinción como signo de gratitud
Con este gesto, la Hermandad de la Divina Pastora no solo reconoce la figura de Manzano Vilches, sino que también reafirma su vocación de memoria y gratitud hacia quienes han marcado con su testimonio de fe el devenir de la corporación. La concesión de esta Insignia de Oro adquiere así un profundo valor simbólico, al consolidarse como un símbolo de pertenencia y afecto por parte de la comunidad pastoreña.
En palabras de la propia Hermandad, esta distinción representa “el agradecimiento sincero a quienes, desde su vocación y ministerio, han acompañado con fidelidad el camino de nuestra devoción mariana”.