El Hospital de los Venerables inicia su transformación para convertirse en un gran centro expositivo de la Catedral de Sevilla

El Cabildo hispalense activa la renovación integral del histórico edificio del barrio de Santa Cruz, que reabrirá sus puertas como espacio museográfico tras formalizarse el contrato de arrendamiento con la Archidiócesis
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Foto: Hospital de los venerables

El Cabildo de la Catedral de Sevilla ha dado un paso decisivo para el futuro del Hospital de los Venerables al poner en marcha su completa rehabilitación, un proyecto destinado a convertir este emblemático inmueble en un nuevo centro expositivo vinculado al patrimonio catedralicio. La intervención se activa tras formalizarse el contrato de alquiler con la Archidiócesis, que recuperó la titularidad del edificio el pasado verano.

Para liderar la recuperación arquitectónica del edificio, erigido en el siglo XVII, la institución capitular ha confiado en el arquitecto Eduardo Martínez Moya, reconocido por su dilatada trayectoria en la conservación del patrimonio histórico. Entre sus intervenciones más destacadas figuran la restauración de la Giralda y de la parroquia del Sagrario, trabajos que le han valido prestigiosos reconocimientos como el Premio Hispania Nostra.

El equipo técnico se encuentra actualmente inmerso en una evaluación detallada del estado del inmueble, analizando su estructura y patologías para definir las líneas de actuación que guiarán la rehabilitación integral.

En paralelo, el diseño del proyecto museográfico recae en el catedrático Luis Méndez Rodríguez, profesor de Historia del Arte y director general de Cultura y Patrimonio de la Universidad de Sevilla. Méndez, con una sólida trayectoria académica y curatorial, ha impulsado exposiciones de referencia y coordinado iniciativas culturales nacionales e internacionales. Su experiencia lo convierte en una figura clave para articular el discurso expositivo del futuro espacio.

El propósito del Cabildo es que el renovado Hospital de los Venerables permita mostrar parte del extenso patrimonio de la Catedral que actualmente no puede exhibirse por falta de espacio: pintura, colecciones textiles, bordados y piezas de orfebrería que requieren cuidados y condiciones de presentación muy específicas.

La intervención supone un nuevo capítulo en la historia del edificio, fundado en 1673 por el canónigo Justino de Neve como lugar de asistencia para sacerdotes mayores. Ahora, más de tres siglos después, inicia una etapa orientada a unir memoria histórica y creación contemporánea, consolidándose como un enclave cultural estratégico dentro del casco histórico de Sevilla.

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