Se presentó este viernes.

En su rosario vespertino del pasado 23 de septiembre, la Virgen del Mayor Dolor de la Hermandad de las Aguas lució su manto recién restaurado. Se supervisaron los daños sufridos por la lluvia del pasado Lunes Santo, retirando deformaciones y el foro de concha perimetral. Se ha limpiado exhaustivamente con micro aspiración y se han eliminado los restos de cera que salpicaban las piezas y el soporte de terciopelo mediante la reposición de terciopelo negro de seda.
Se ha completado con la restauración, limpieza química y alineado de todo el encaje de concha perimetral que se encontraba en un precario estado para, posteriormente, volver a colocarlo rematando la pieza. El manto fue bordado por las Hermanas Trinitarias en 1956.