Más de un millar.

El Consejo de Hermandades y Cofradías ya trabaja, de cara a la Semana Santa de 2023, en mejorar la seguridad de la calle Sierpes. Habrá unas 1.100 sillas menos en esta vía de la carrera oficial, algo fijado desde el año pasado, aunque no se aplicó con la intención de que los ingresos económicos tras la pandemia no se viesen afectados.
El objetivo es crear un carril central que garantice que los cortejos transcurran de forma sosegada, eliminando las áreas más saturadas. La junta superior considera que no es necesario adaptar otras zonas debido a que se cumplen todas las medidas de seguridad.
En 2018 ya se eliminaron 500 sillas, y ahora en 2023 serán 1.100 los abonados afectados. No habrá vallas delanteras como en el resto de puntos del recorrido, sino que se habilitará un pasillo central de tres metros, tomando como referencia el punto más ancho de la Carrera Oficial que va desde los 2’70 a los 3 metros.
Se evitará que los abonados tengan que recoger sus sillas. En las zonas más anchas no se retirará ninguna fila de asientos, siendo retiradas únicamente la de la parte trasera.
Ya hace años se habló, por parte del Consejo, de instalar gradas o tribunas en la Avenida, en las zonas de Banco de España y calle Fernández y González.