Una medida inesperada.

La Hermandad de la Macarena procedió en la madrugada del jueves a la exhumación de los restos mortales de Gonzalo Queipo de Llano y su esposa Genoveva Martí (a las 2.20h), así como del general Francisco Bohórquez (a las 23.51h) cumpliendo con lo acordado en la Ley 20/2022 del 19 de octubre, de Memoria Democrática en los artículos 38.3 y 35.5.

La Ley de Memoria Democrática es clara y prohíbe que los restos mortales de dirigentes del golpe militar de 1936 sean inhumados en un lugar preeminente de acceso público. Bohórquez fue auditor de guerra y responsable de la ejecución de sentencias con aplicación de bando de guerra.

La exhumación se ha efectuado en un ambiente íntimo y con el respeto absoluto de los familiares, a disposición de quienes se ha puesto la corporación, pidiendo respeto para ellos.

La Macarena reclama ser dejada al margen de cualquier polémica ideológica y política ajena a los fines de la misma y a sus asociación católica y desea desaparecer del foco mediático. Ahora no quiere que sea utilizada esta medida con intereses partidistas o ideológicos. Se han comprometido con las leyes en el estado democrático.

El portavoz del grupo VOX en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros, ha tachado de inexplicable la obediencia y doblegación del hermano mayor de la Macarena, José Antonio Fernández Cabrero, a la ordenanza del Gobierno.

Este jueves se ha visto que donde estaban los restos de los difuntos se han colocado unas alfombras y se ha acotado el paso para que nadie pase hasta que se puedan acometer las obras necesarias que tapen por completo las dos fosas.