Pudieron verse en su salida extraordinaria del pasado mes de octubre.

Este martes se celebró un cabildo extraordinario en la Hermandad del Museo para abordar la posibilidad de que María Santísima de las Aguas recuperase y luciese de forma permanente, tanto en los cultos internos como externos, a partir del próximo besamanos, las mano entrelazadas originales que gubiase Cristóbal Ramos en 1772.
La junta de gobierno se reservaba el derecho a que las manos abiertas que tallase Antonio Infantes Reina en 1922 pudiesen figurar tanto en su triduo como en su besamanos.
Al no haberse alcanzado los dos tercios necesarios de los votos emitidos, la propuesta ha sido denegada. Se registraron 237 votos, de los cuales 145 fueron a favor, 90 en contra y 2 nulos.