Ha permanecido fuera de la parroquia de San Gil todo el mes de abril.

Ya ha sido repuesto al culto el Simpecado de la Hermandad del Rocío de la Macarena tras la intervención realizada por el taller de bordados Santa Clara durante el mes de abril. Consiste en el traslado de los bordados de la parte trasera (donde figura el anagrama «Ave María») a un nuevo moaré de seda de la misma tonalidad. También se han limpiado los bordados e intervenido los hilos de la obra para liberar las tensiones presentes.
Como bien saben, los relicarios de los restos del primitivo moaré de seda se pueden adquirir en la corporación.